lunes, 13 de octubre de 2008

TRANSITO DE VENUS

Tránsito de Venus
Por Jean Suriel


TRANSITAS
por los espacios que invento
de la nada.
Pero transitas lentamente,
casi estática,
en cuadros fotográficos y fílmicos,
como Venus
y simulas el camino sideral,
opacando la luz con tu luz
y el sol simplemente se ennoblece.
Eres la belleza escondida en lo sublime,
en lo que trasciende y ahonda en el alma,
en lo que esclaviza y libera al unísono
el deseo de la morada sensitiva.
Eres por tu aliento de eternidad en la presencia,
eres por tu toque de ternura en los gestos,
eres por tu sutil correalidad con el infinito
y porque habitas en las dimensiones y moléculas
del Cosmos.
No eres porque superas lo inmóvil y rígido del mármol,
no eres porque das matices a las cosas incoloras,
no eres porque transitas en las direcciones del pensamiento
y porque agregas sentido a la acción de mirar, de sentir, de palpar.
Cuando transitas detienes el fondo y la forma
y te pareces al dulce susurro del Universo
en su camino inconcluso, en años luz,
por nebulosas grises
y das continuidad al movimiento que no acaba.
Te busco divagando en el mito articulado,
te busco y te encuentro entre las diosas del Olimpo.
Me doy a la fuga en el estudio de la efigie
como faro que devora la noche y la penumbra,
como vigía que avizora infatigable su único objetivo.
Brotaste, transitando, de la espuma de mis dedos,
así en cada aguja del reloj en fuga
tras el tiempo que huye en cada punto en la arena.
Acudo presuroso a contemplarte
a la orilla del infinito, al borde de los cipreses,
al vasto caudal de lo Absoluto.
Acudo a descubrirte
en el eros cincelado y taciturno de la imagen.
Pero eres más que imagen
porque prevaleces, sempiterna, a la mitología,
a la escultura, al dato astronómico.
Alcanzas la dialéctica y la fluidez de lo perpetuo
con tan sólo una inclinación en tu pedestal nacarado
y renuevas los contratos de lo indecible en el acto.
Fuiste, eres, serás
la Venus que estremece los cimientos de las olas
y, en tu tránsito, retornas
al soplo de nacer entre la concha de mis manos.

2 comentarios:

Naiboa Literaria dijo...

Transito de Venus:Poeta, estuve navegando por senderos oscuros, sin ver la grandeza de mi igual, con la sola idea de estar solo, pero me doy cuenta que Venus ha estado transitando conmigo en todo momento. Siga derramando el tintero hasta secar la ultima gota.

Héctor A. Martinez Diloné dijo...

Qué grato recuerdo leer de nuevo estos versos. Me alegra que estés en NaiboaLiteraria.
De nuevo tengo que recurrir al diccionario y a la imaginación sin orillas.
Muy bueno.