Selva citadina

Por: Eddy Ulerio

He perdido mi visión
en un golpe de luz,
se nubla mi razón
por encontrar la virtud.

Mis pasos se han quedado
rezagados en el jardín,
el humor se ha fastidiado
del pensamiento ruin.

El entorno huraño
manifiesta su intención
con el paso de los años
deambula sin emoción.

El cinismo sale a la calle
hace alarde de su plata
no busca consenso de nadie
se viste de traje y corbata.

Confinado sin remedio
a la injusticia rampante
al silencio de los buenos
a las rodillas vacilantes.

Marginado de tolerancia
perseguido por las ideas
despreciado con jactancia
denotado por mi aldea.

Decálogo Joven

Por: Sandy R. Genao Cruz

1. Llamo

Llamo a las puertas y nunca se abren,

toco e insisto, pero nadie sale,

seguiré intentando, alguien me oirá.

2. Busco

Busco qué hacer, pero nada encuentro,

eso me deprime algunos momentos,

mas no me detengo y sigo mi andar.

3. Quiero

Quiero salir del profundo abismo,

demostrarles a todos que soy bueno y digno

que tengo talentos, que soy muy capaz.

4. Tengo

Tengo que mantener mi frente en alto,

no desesperar y seguir luchando,

prepararme bien para poder triunfar.

5. Deseo

Deseo que a mí se me tome en cuenta,

que entiendan que el tiempo es quien da la experiencia,

y que me merezco la oportunidad.

6. Entiendo

Entiendo que aún me falta camino

que no será fácil este recorrido

pero estoy dispuesto este reto aceptar.

7. Comprendo

Comprendo que aún la madurez me falta,

que la formación un gran esfuerzo manda,

pero con empeño lo voy a lograr.

8. Pido

Pido que no me descarten sólo por ser joven,

que no me reprueben sin ver mis acciones,

que sólo me den la oportunidad.

9. Exijo

Exijo mi acceso a la labor productiva

que tomen en cuenta mis iniciativas

que se reconozca mi capacidad.

10. Sociedad

Tú sociedad que me excluyes y descartas,

que sólo te empeñas en mirar mis faltas,

recuerda que soy tu producto final.

Quédate

Por: Nicolás Guevara

No te alejes, aunque la mañana quede tendida en el asfalto

no importa si el mar pierde su color y la tarde cae como bruma

sobre las almas sin nombre de la ciudad.

Quédate cerca y presiente el invierno adormecido por los siglos,

la muerte de tus latidos perdidos en la oscuridad.

Aunque la noche doblegue su aroma en madrugada

y la incertidumbre del silencio domine el amanecer

quédate a dibujar los días con su misterio y su coraje hasta el fin.