lunes, 27 de enero de 2020

La estación

Por: Nicolás Guevara

El tren se ha ido
me ha dejado solo en la estación
ni siquiera el silencio me acompaña
solo una valija con trazos de recuerdos
en la que guardo los pasos que me nombran
y llevarán de regreso
a donde emerge y ancla mi alma.

lunes, 20 de enero de 2020

Lenguas

Por: Camelia Michel

Me encontré hablando miles de lenguas contigo: las romances y las sajonas, las hijas del sánscrito antiguo. No quedó lugar sin recorrer en la música, en el gesto silente de los mudos. Hablamos el lenguaje de las bestias y toda suerte de sonidos no articulados: de la brisa que cantaba y del hipnótico mar. Pero me ha quedado la duda: por ventura, ¿alguna vez entendiste el esperanto de las almas? ¿Alguna vez sentiste guijarros en el estómago y un nudo en tu plexo solar? ¿Alguna vez supiste el idioma quebrado y angustioso del amor? ¡Ay, vida mía! Y si nos secuestra la aurora, ¿hablaremos el lenguaje de los cuerpos, o habrá alguna boca que clame por auxilio?

sábado, 4 de enero de 2020

Jardín obligado

Por: Humberto Rivas

Jardín apacible de osamenta
forrado,
visto de reojo desde un vehículo
en marcha
que raudo teje kilómetros
mientras se va tragando el asfalto.

Al lado de la vía
en un campo santo,
florecen entre hierba
desbordada y recortada,
entre claveles y crisantemos,
inermes a las críticas foráneas
e impávidos al vaivén de la materia,
quienes alguna vez también pasaron esquivos
viéndolo lejano, de reojo,
con una maleta de planes futuros
colmada.

El autobús siguió su avance,
dejamos atrás ese terruño,
espacio húmedo,
de larga siesta
bajo la arboleda.

Con mucha prisa
se aleja
como si tuviera
este metal sobre ruedas
conciencia de la muerte.

Nos fuimos alejando
con la incógnita certeza
de saber que sí, pero no cuándo,
cuándo nos veremos,
o más bien serán vistos también nuestros despojos
entre madreselvas,
jazmines y camelias,
en el jardín obligado,
con una lápida recordatoria,
una cruz, quizás una foto,
y un epitafio
que a veces dice cosas ficticias aunque hermosas.
Ojalá el nuestro sea esto último
y que todo
sea cierto.