domingo, 7 de diciembre de 2014

La espera

Sandy R. Genao Cruz

Parado en una esquina
hecho un manojo de nervios
esperé la hermosa chica
a su salida del colegio.

Era una tarde lluviosa
uno de esos días lentos
las calles lucían desiertas
y el frío quebraba los huesos.

Esperé, pasaron las horas
y la chica no llegó
hasta que al fin me enteré
que con otro se marchó.

Pasé de la espera al llanto
luego del llanto al dolor
nunca pensé sufrir tanto
por alguien que no llegó.

Han pasado veinte años
y aún todas las tardes espero
la chica que quise tanto 
a que salga del colegio. 

miércoles, 19 de noviembre de 2014

La Mujer



Por: Laritza Orleanis Inoa Suero

Una mujer es una persona capaz, independiente, inteligente y audaz.
Es sensible y hermosa, capaz de demostrar que la belleza no es sólo lo que importa.

Siempre se ocupa de los pequeños detalles y esas bonitas cosas. La mujer tiene una personalidad hermosa, y no se conforma con los pequeños detalles, le fascinan las cosas grandes.

Tenemos que demostrar que las mujeres somos capaces de grandes cosas. La mujer es importante, sensible, tal vez tolerante, y lo más importante: da la vida a un nuevo ser que nace con el dulce cariño de su madre.

Una mujer es guerrera, es dulce y sincera; no merece malos tratos, mejor un beso que un rechazo…   ¡que viva la mujer!

jueves, 16 de octubre de 2014

Mundanidad reivindicada



Por: Humberto Rivas

Hay  vacíos que ni dios puede llenar
pues estaría violando la libertad.
Hay un vacío de un tú carnal
hay un vacío de abrazo mortal.

Así como no sacia dios el hambre de pan
así no sacia el ansia de besar
porque el hambre de pan
sólo el pan la puede saciar.

Hay caricias que se necesitan sobre la piel
como besos, que curen el alma, como a la boca  la miel.
Sentir el abrazo caliente de tu pecho
mientras el sol nos guiña el ojo derecho.

Necesito de la vida el espíritu que  me alienta
pero también tu cuerpo, tu cuerpo que me calienta.
Y así como la luz aleja mis pies del extravío
el toque de tus manos  llena este mi vacío.

Pues como decía un viejo amigo mío
a Dios lo que es de Dios y al César
lo que es del César.

jueves, 2 de octubre de 2014

Martes 6


Por: Nicolás Guevara

Vino el viento y se llevó las hojas secas
que una vez me dieron sombra.
Vino el viento y ya no estaba tu rostro
sólo el olvido como estaca en la memoria.



(Tomado del libro: Poetidiario. 1998)
 

viernes, 12 de septiembre de 2014

Estoy de vuelta



Por: Sandy R. Genao Cruz

De nuevo estoy de pie
no me venció la caída
hoy vengo con nuevos bríos
Con metas mejor definidas.

La tristeza se marchó
la eché fuera de mi vida
por fin la puerta se abrió
por fin encontré la salida.

Ya no están los días sombríos
ni las noches de desvelo
hoy el mundo es diferente
lo veo con ojos nuevos.

Aunque en momentos flaqueé
y me embargó el desaliento
nunca abandoné la fe
ni los buenos sentimientos.

Hoy camino más tranquilo
al menos me siento mejor
y aunque a veces estoy triste
al menos tengo el control.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Ánfora



Por: Jean Suriel

ÁNFORA sedienta de ser y tiempo
mojada de universo
la que espera en el horizonte
la creación de la luz
y del espectro

Ánfora hambrienta de barro y vida
hecha de carne y aliento
alada en el espacio de las aves
hermosa en el campo de las flores
y diosa en el entorno donde toca

Ánfora inventada en el aire
en las cavernas
en los rincones
en los caudales
en las estrellas

Ánfora en la mano del artífice
ánfora escapada de la piel
ánfora multiplicada en las calles
ánfora anclada en las sienes
ánfora, mujer, ánfora

lunes, 1 de septiembre de 2014

Razón de ser



Por: Jacinto Sención Mateo

Un día más que nos sonríe
una oportunidad para caminar
entre obstáculos y equívocos
con miedo a lo novedoso
pero con ganas de ser feliz.

Nos persigue el egoísmo
el desaliento nos vigila
entre el trabajo que pasamos
y las ganas de trabajar
nuestro humor decidirá.

Adiós al rencor y las mentiras
son enemigos de la vida.
Sí al perdón en el amor
a la luz del corazón
como dos enamorados.

Salimos con rumbo fijo
correcto el camino
con fe y optimismo
el deber cumplido
un día más que nos sonríe.

sábado, 23 de agosto de 2014

La espera


Por: Franklin A. Peralta E.

Robo bancos
encantando con poemas las cajeras.
Diseño sillas
con círculos y estrellas.

Cuando sale el sol,
entre tormenta y tormenta,
en el carro de fuego
me disfrazo de rueda.

No tengo respuesta
para tu pregunta
de por qué trae flores
la primavera.
Y cuando me miras
levanto una pared de piedras.

Un pájaro azul me trae tu esperanza
y con ella me deleito y juego
para que te desespere
la espera.

viernes, 22 de agosto de 2014

Mal de amor y precundía



Por: Rafael Álvarez de los Santos

En nuestro país, manejamos una serie de conceptos que, si no son originalmente nuestros, hemos sabido aplicarlos muy bien, pero en lo que llevo viajando a diferentes países de habla hispana jamás los he escuchado.

Uno de esos conceptos, hoy menos utilizado en el habla más moderna del dominicano, es el de precundía. Ahora bien, el hecho de que el vocablo haya entrado en fase de extinción no significa que la realidad que define haya cambiado.

La precundía es ese sentimiento de impotencia que nos asalta cuando el amor se nos ha ido de la piel y apenas queda aposentado el malestar en el lado izquierdo del pecho y por demás lo único que late en el cuerpo. De la precundía conocemos los efectos: la tristeza nos invade, disminuye el apetito, pierde sentido la vida y casi todo.

El gran problema de la precundía estriba en el sentimiento de culpa que puede generarnos el haber perdido un amor asumiendo que no hicimos lo correcto. Una vez se nos ha ido y valoramos lo que teníamos nos resistimos a la idea de dejarla ir, de saber que en algún momento pueda rehacer su vida y encontrar en brazos de otro lo que una vez tuvo en los míos y que descuidé.

Es aquí donde empieza el esfuerzo estéril por recuperar lo perdido, porque no supimos leer el lenguaje de un corazón desmotivado, perdimos el horizonte y hoy la brújula no nos sabe señalar el camino, entonces la precundía se encarga de poner la nota triste, de sacar a flote los sentimientos verdaderos los que debieron ser y que no fueron o dejaron de ser. Por lo general, cuando aparece la precundía, es porque el amor se ha ido y esto es lo triste: llevar ese dolor en el alma y  las nostalgias a cuestas.

Lo que hace peligrosa la precundía es el mal de amor con aquejamientos de celos, ese creernos los dueños absolutos de lo que teníamos y perdimos, esa sensación egoísta de no dejarla ser feliz cuando tuve toda la oportunidad de hacerla feliz, cuando se envanece el ego y nos asalta la desgraciada expresión de que “si no es conmigo, no será con nadie”. Cuando sabemos que antes todo era conmigo, pero lo descuidé, me dormí en mis laberintos, me confié demasiado y sin tomar en cuenta que en la confianza está el peligro.

Cuando el amor nos ha dejado entonces entra el mar, se produce un tsunami de sentimientos malsanos que casi siempre terminan truncando la vida de quien en algún momento nos permitió que le diéramos vida sin más exigencias que un abrazo, un beso, un te quiero expresado a tiempo y a destiempo, preocuparnos de saber si desayunó, si comió, cómo le fue en el día y cómo será nuestra noche. Y ahí es donde está el detalle, en que perdimos los detalles.

El mal de amor y la precundía son una funesta manifestación del hundimiento de las almas en la desolación de la miseria sentimental que nos abate, del estremecimiento del espíritu al que nos somete y nos expone el desamor porque no supimos leer el lenguaje de un corazón atribulado y el mundo de lo que era se derrumba.

Lo triste del mal de amor y la precundía son las decisiones que tomamos que por lo general es truncar la vida de quien en algún momento nos la dio. Si fuiste torpe para descuidarla no seas sabio para matarla porque amar y matar puede que rimen, pero en nada se parecen.

domingo, 27 de julio de 2014

Poema a la alegría



Por: Nicolás Guevara

Que no nos roben la alegría.
Hagamos eslabones de nuestras manos
murallas de nuestras piernas.
Que no nos quiten la sonrisa
nuestra enérgica sonrisa de música y sudor.

Somos muchos entre los árboles
muchos para plantar la ternura
por encima de la roca
y caminar los continentes.

Que no nos cierren los caminos
siempre los abriremos
con nuestras manos florecidas de multitudes
con nuestros pasos inclinados hacia la luz.

Llevamos la vida
vestida por un vuelo de palomas
que saben danzar el viento.

Que no nos roben la alegría.
Hagamos eslabones de nuestras manos
murallas de nuestras piernas
y dejemos que caiga la lluvia
mientras cantamos.

(Tomado del libro: Después de un cuarto de siglo. 1989)

viernes, 30 de mayo de 2014

¡A buena hora Clío!




















Por: Jacinto Sensión Mateo

La dulzura de sentirte
de tenerte entre los brazos
como una realidad
de poder contar contigo
sentido que hoy reafirma
tu vida que se nos da.

Ayer con Teo, hoy contigo,
que vemos brillar el mundo
por segunda vez la vida
fruto de un amor profundo
para un ser tan especial.

¡Cómo no agradecer a Dios!
¡Por qué no celebrar el momento!
Si la alegría la siento
y agradeceré todo el tiempo
por sólo saber que estás.

A buena hora Clío
queremos compartir contigo
una vez más nuestra alegría
por tu vida que se nos da.